La Unión General de Trabajadores condena los terribles atentados perpetrados en iglesias y hoteles de Sri Lanka que han causado, por el momento, 150 muertos y más de 400 personas heridas.
Estos atentados que se han perpetrado en diversos puntos del país, aprovechando la congregación de fieles y la estancia de turistas, representan un duro ataque al país que lleva luchando años por la convivencia pacífica entre comunidades, culturas y religiones, tras una década de guerra civil por motivos étnicos y religiosos.